Ventajas de la comunicación empática

Son muchas las ventajas de la comunicación empática. Las empatía nos permite percibir el mundo de una manera diferente. Nos aporta un nuevo punto de partida para las relaciones personales, la comunicación y la gestión de conflictos. El objetivo de la comunicación empática  y la Comunicación No Violenta (CNV) es establecer una relación basada en la honestidad, la empatía y la claridad. Promueve el desarrollo de la escucha atenta y el respeto, tanto a mí mismo como a el otro.

En ocasiones hablamos sin saber bien qué necesitamos. No prestamos atención al curso del diálogo y de algún modo acabamos arrastrando al interlocutor a través de una divagación sin rumbo. A veces necesitamos “desahogarnos”, nos servimos de los demás como “papeleras” de palabras, pensamientos y sentimientos. Pero esto tiene consecuencias en el otro: la pérdida de interés, el distanciamiento emocional, reacciones defensivas o consejos que no hemos pedido.

La comunicación empática  te propone reestructurar tu forma de expresar y  de escuchar a los demás. El primer paso es la “toma de consciencia” o autoescucha. Hazte consciente de lo que observas, lo que sientes y lo que necesitas. De este modo se verán reducidas tanto tus reacciones habituales automáticas como las reacciones  de resistencia y defensa inconscientes del otro.

Cuando toca escuchar, la propuesta es aparentemente sencilla: escuchar realmente, sin responsabilizarte de lo que oyes. Sin intentar cambiar lo que escuchas. Prueba simplemente a conectarte con lo que la persona piensa, siente y necesita.

Autoestima y empatía

La autoestima implica llegar a ser Yo de modo auténtico. Poder mostrarme tal como soy, en mi grandeza y en mi vulnerabilidad. Prescindir de las defensas innecesarias, las corazas y las máscaras. Saberme y sentirme un ser digno. Pensar que lo más valioso que puedo ofrecer es mi honestidad.

Sin embargo a menudo nos sentimos reacios a revelar nuestra vulnerabilidad por miedo a perder autoridad o el control de la situación. Aquí la empatía juega un papel clave. Cuanto más conectamos con los sentimientos de los demás menos tememos abrirnos, porque reconocemos la vulnerabilidad en el otro. Reconocemos que todos tenemos sentimientos y necesidades que nos apremian, aunque las expresemos en modos distintos.

En aquellas ocasiones en las que pienso que me están humillando o abusando de mí tal vez me sienta demasiado herido, furioso o asustado como para conectarme empáticamente con esa persona. Puedo entonces retirarme físicamente de la situación para conectarme conmigo mismo, reflexionar y sentir. Otra posibilidad es compartir esos sentimientos con otra persona que para mis sea una fuente segura de comprensión y apoyo.

Primero debo conocer las necesidades que se desencadenaron tan intensamente en mi interior y  recibir yo la empatía que necesito. Una vez que esté claro en mi pensamiento y en mi sentimiento podré valorar si regresar a la situación de conflicto y establecer empatía con esa persona que sentí previamente como una amenaza.

Cuando atendemos a los sentimientos de alguien dejamos de percibirlos como una amenaza o como incomprensibles. Cuando empatizamos con alguien que está enojado antes de confrontarlo conseguimos dos cosas. Por un lado, esa persona se sentirá entendida y respetada. Por otro, nosotros nos protegemos de tomarlo como algo personal, de la sensación de rechazo.

Ventajas de la comunicación empática  y Desarrollo Personal

El Desarrollo Personal nos lleva, entre otras cosas, a la consecución de nuestros objetivos. Para ello a veces necesitamos la colaboración del otro. Hagamos entonces peticiones conscientes. Si somos claros con respecto a lo que queremos es mucho más probable que lo consigamos.

Debemos atender a cómo planteamos nuestra petición. Es fácil caer automáticamente en la exigencia o en el chantaje emocional, generando en el otro una actitud de sumisión o de rebeldía.  Cualquiera de las dos será contraproducente para la relación o para que se realice lo  que estamos pidiendo. Las personas funcionan bien por compromisos, no por coacción. Evita los juicios y las críticas. Cuanto más culpemos o castiguemos a los demás más probablemente interpretarán nuestras peticiones como exigencias.

Exponemos nuestros sentimientos y necesidades, de modo que no resulten una petición arbitraria. Nos expresamos abiertamente atendiendo a la reacción del otro a nuestras palabras, lo que siente, lo que piensa. Nos mostramos receptivos a la sinceridad del otro, aceptando sus necesidades.

En el árbol, el desarrollo de la empatía es uno de los focos principales en nuestra propuesta de acompañamiento psicológico. Pide una cita de orientación para conocernos.